De vuelta a la Mansión Ashford [Haze & John]

Se dibujó una sonrisa en mi rostro apenas divisé la mansión, después de la noche que había pasado en ese hospital lleno de infectados no quería nada más que llegar a casa, donde nada ni nadie me dañaría - Ya llegamos- Le dije a Haze con una sonrisa. Apenas bajamos del barco nos las ingeniamos para poder llegar hasta acá y es que, la verdad, de no haber sido por él no sé que hubiese hecho, no estaría yo aquí, de eso estoy segura.

Lo invité a pasar y apenas al cruzar por la puerta llegó mi nana gritando de felicidad y casi llorando -¡Niña, niña! ¡¿Donde te habías metido?!- Hizo una pausa y me abrazó con fuerza - El señor Sidelside se enteró de todo y cuando me lo dijo casi me da un infarto- Dijo preocupada. Correspondí el abrazo y sonreí - No pasó nada, gracias a él... Nana, te presento a Hijikata Toshizo, de no ser por él no se que hubiese hecho- Lo miré - Se quedará aquí hasta que termine un tratamiento, así que trátelo bien, Nana- Dije en un tono de broma. Mi nana se volteo a mirarlo y se acercó - Toda persona que ayude a mi niña es bienvenido aquí, ¿Quieres algo de comer o de tomar, hijo? pareces cansado- Lo llevaba al comedor mientras iba sermoneandole sobre "el buen comer" y lo importante que es en los jóvenes, cosas de la Nana.

Reí un poco y los seguí hasta el comedor, una vez recuperáramos fuerzas, seguiría con su tratamiento... Si el virus que tiene es el G, podría fabricarle anticuerpos con ayuda de la sangre que extraje de John y balancear un poco las dosis de G y anticuerpos. Así no perdería sus habilidades ni mutaría como normalmente lo hacen los huéspedes del G.

El viaje fue arduo para él en primera instancia. El mal tiempo nunca ayuda y su estado seguía siendo casi lamentable. Tras abandonar el barco para ir hasta la casa de Tanya Haze pudo notar como su cuerpo comienza a cambiar. Sus sentidos se han ido agudizando lentamente.
-Vaya...No me dijiste que vivías en una mansión...-Dice ajustando el petate a su espalda. Al entrar se fija en todo a su alrededor, también en la mujer que viene a recibirles abrazando a la joven.
"Vaya...Si que son pintorescos..."La mira cuando habla de él y frunce el ceño un tanto, pues no está acostumbrado a recibir elogios por parte de nadie. Avanza un paso pero la mujer le toma el brazo casi arrastrándolo hacía el interior.
-Wuo wuo...Calma...-La muleta ya no la lleva bajo su brazo, sus costillas ya no le duelen no recuerda cuando ni como ha ocurrido exactamente, pero cuando pone la mano sobre su propio abdomen sabe que las costillas se han curado solas.

-Gracias supongo...La verdad es que es sorprendente, es una mansión muy bonita...-Se fija en la decoración a su alrededor hasta llegar al comedor de la casa.
Mira a Tanya y niega con la cabeza sin esconder la amplia sonrisa que no ha dejado de mostrar desde que ha llegado.
-Es como si no solo vaya a estar a salvo de lo que llevo dentro sino que además me ha sonreído la buena fortuna, este lugar es perfecto, apartado del bullicio...-Da unos pasos por si mismo dejando el petate en el suelo y se estira cansado.
-Sinceramente antes de comer me gustaría darme un buen baño, mataría por un baño caliente...-Dice mientras cierra los ojos y se frota la nuca con su mano derecha.

Ambas, Nana y yo, lo miramos y sonreímos, parecía ser muy buena persona... Me sorprende que haya llegado hasta ese vacío hospital, pero también me alegro de que lo haya hecho - El baño está por allá, le llevaré ropa nueva- Le dijo Nana y lo encaminó hasta el baño, después subió las escaleras para buscar ropa que pudiese quedarle a Haze.

Suspiré y miré por la ventana del comedor, no podía creer que en realidad estaba en casa, en mí casa... John seguro estaba buscándome, siempre lo hace - Ah ¿Ya le haz dejado la ropa?- Pregunté apenas regresó mi Nana. Asintió sonriendo y se sentó a mi lado tomándome la mano - Sabía que volverías, eres tan testaruda como John, sabía que no descansarías hasta regresar- Dijo en broma - He tenido mucha suerte a decir verdad - Sonreí - Pero me alegro de estár en casa por fin - Agregué.

No soporté más, así que pregunté por John. Mi Nana me miró, casi a las risas y dijo - Tranquila, tranquila... Seguro que no tarda en llegar, le mandé un mensaje al celular después de llevarle la ropa al muchacho, llegará pronto - Suspiré de alivio. Ya nada parecía ir mal, John volvería pronto y podríamos empezar con el tratamiento de Haze... Aunque aún no se como reaccione John ante él, después de todo el viru G es el virus G... No desaparece ese instinto depredador que tienen.

Asiente a Nana y llega al baño, cierra la puerta y se quita la ropa. Se mira al espejo, se siente distinto, Empieza a ver algunas canas en su pelo, lo cual lo saca de sus casillas por completo.
-Pero que cojones!?...Canas!? No puede ser!? Que será lo próximo impotencia!?-Se da la vuelta para meterse en el la ducha. Abre el grifo y deja que el agua caiga sobre su cuerpo para relajarse. Pone la presión a tope al igual que el agua bien caliente. Su mano derecha va contra la pared dejando el brazo extendido.
"Sigo vivo...Se han portado de gran manera conmigo...Pero él...No puedo ablandarme ahora...Ni tampoco olvidar lo que ha pasado ahí fuera, esto no cambia nada..."Alza la cabeza para verse ténuemente reflejado sobre las baldosas.
-No soy un monstruo...No soy como vosotros...Yo no lo elegí, yo no quise esto...Ahora vivo con ello, y encontraré la forma de deshacerme de esta maldición que ahora me atormenta...

Cierra el grifo y sale de la ducha recogiendo el pelo con su mano, lo escorre y deja caer todo el agua sobre el plato de la ducha. Camina pocos pasos hasta la cesta de la ropa.
De él toma la ropa que le han traído no puede evitar reír.
-Debe de ser una broma...-Al salir del baño vuelve al comedor para reunirse con Tanya y Nana.
Lleva puesto un traje de pantalón negro, camisa blanca y corbata roja. Se ha peinado con toda la melena recogida detrás de la nuca excepto algunos flecos que se escapan alrededor de su frente.
-No me acostumbro a llevar este tipo de ropa...-Con las manos en los bolsillos se acerca a Tanya, se puede ver en sus mejillas un ligero rubor, termina por mirar a su derecha para mantener la vista ocupada.
-Gracias de nuevo por permitirme descansar aquí...
Cierra los ojos y de nuevo baja un poco la cabeza para dejar que sus propios pensamientos ocupen su mente.

Tomaba un café para relajarme, hacía buen clima en la mañana, todo era tan distinto a aquella noche fría. Mire por sobre mi hombro derecho y vi a Haze volver vestido con uno de los trajes de John, se acercó a mi y dijo "gracias"... ¿Por qué?, soy yo quien le debe la vida - No es nada, tranquilo- Sonreí y me puse de píe - Yo también tomaré un baño, empiecen a comer sin mi, ya bajaré después- Les dije a ambos y sonreí por segunda vez.

Subí por las escaleras y fui al baño de mi cuarto, llené la tina y puse un producto con olor a rosas para el baño de burbujas... ¿Qué? incluso yo necesito un descanso. Nana preparó el desayuno y lo sirvió a Haze, le preparó un omelette y tocino, además de servirle jugo de naranja, lo ideal para empezar el día -Estas jóvenes de ahora, de por sí parecen radiografía y todavía se quedan sin comer- Se quejó con Haze en forma de broma y se sentó a comer junto con él - No sabes lo agradecida que estoy contigo por haber traído a esa niña de vuelta, insistió en vivir sola para estar más cerca del trabajo y mira, una semana y ya está en casa de nuevo- Rió un poco y continuó desayunando.

No puede evitar imaginarse devorando esa omelette como un verdadero animal, está hambriento desde hace días y no le cuesta reconocerlo. Su estomago ruge, y observa un tanto indiferente a Tanya mientras se va.
Vuelve a mirar a Nana, sonríe de forma pícara ante el comentario y se permite añadir algo, toma los cubiertos y tras juntas las manos empieza a comer.
-Pues yo no le veo anda de malo a esa "jovencita"...-Ríe levemente y sigue comiendo como si no hubiera un mañana. Se coloca una servilleta en las piernas para evitar mancharse mientras devora lo que le queda en el plato.
Cuando termina ya al fin de tragarse la comida, la cual apenas si mastica y saboreo hasta el exceso de llenarse la boca de saliva vuelve a mirar a Nana.
-Bueno...Em...Puedo repetir?-Sonríe ampliamente con los cubiertos en la mando levantados, espera que la respuesta sea sí, o de lo contrario se verá obligado a cometer una acción poco honorable.
Mientras espera, deja con cuidado los cubiertos a la derecha del plato y de su bolsillo saca su móvil, la pantalla muestra la hora y de wallpaper lleva una imagen la cual muestra un tiempo, 89 horas con 32 minutos 6 segundos y sumando.
"Es el tiempo que llevo infectado...Me administró el anti-virus, pero poco tiempo después me dijo que no estaba del todo curado...No soy como tú...No soy un monstruo..."
Inmerso en sus pensamientos es inconsciente de que sus ojos se han cerrado con fuerza, al igual que su mano alrededor del móvil.

-¡Ah!-Sale de su trance momentáneo y se fija en el plato, sigue vacío y eso lo hace sentir aun mas hambriento. Las tripas le vuelven a rugir y una mueca de desilusión se forma en su rostro, sin dejar de hacer esa cara mira a Nana intentando causarle pena y con suerte un poco mas de comida aparecerá en el plato.
-Soy joven necesito alimentarme Nana-Le pone cara de joven escuchimizado apretando mucho los labios, antes de saber siquiera la respuesta se ata otra servilleta al cuello y toma el cuchillo y tenedor.
"Que hambre...Además está todo tan rico...Solo espero que Tanya no tarde en bajar, básicamente por dos razones obvias, la primera y mas importante es que o se da prisa o pienso comerme hasta los platos, y la segunda es aun mas obvia, estas costillas no se pueden haber curado por algo de magia, algo me pasa...Y creo que ha llegado la hora de las preguntas..."

Nana miraba feliz como Haze comía su desayuno, si algo le gustaba es que la gente apreciara su comida -Pero niño, si no hace falta que me hagas esa cara, claro que te sirvo más, todo lo que quieras- Sonrió y le sirvió otro plato a Hijikata.

Mientas, yo pensaba en lo que pudo causar ese brote de virus T... Algún enfermo quizá, alguien que llegó al hospital con mucha, mucha fiebre... Seguro lo había transmitido un roedor, pero, de ser así... ¿Cuántos infectados más habría sin reportar?. Mi mente estaba en blanco, no sabía que pensar - Ahora lo único que puedo hacer es brindar apoyo a las asociaciones, nada más...- Susurré y termine de enjuagar mi cabello, salí de la bañera y deje que el agua se fuera. Me coloqué una toalla alrededor del cuerpo y una más en el cabello para ir hasta mi ropero. Tomé un vestido blanco y unos zapatos a juego, me vestí y baje a desayunar junto a Nana y Hijikata.

No comí mucho, aún sentía un nudo en el estomago por tantos sustos que pasé, nunca creí enfrentarme a algo así en mi vida y, si lo había hecho, siempre estuvo John para cuidarme... "Me considero afortunada" - Perdón, Nana... No tenia mucho apetito, no es por que tu comida esté mala- Me disculpé antes de cualquier regaño. Nana me miró y sonrió divertida, esperando soltar algún chiste - Llegas a enflacar un poco más y te desapareces, niña... Pero bueno, por ahora te perdono si prometes que en la cena comerás bien- Me miró y ambas sonreímos - Lo prometo, Nana- Respondí

Miré a Hijikata y pude notar una mejoría en su brazo, durante el viaje le quité los puntos que le había hecho para evitar que se quedaran en la piel y lo dañaran - El virus que está en tu cuerpo... Es el que te esta curando, no los medicamentos que te administré... Los anticuerpos parecen estar respondiendo bien pero, no te voy a mentir...- Hice una pausa - Ya no eres humano- Dije sin más.

Termina ya el tercer plato y es entonces cuando ve aparecer a Tanya por la puerta, pero lo hace apenas de reojo sin dejar notar que la está observando, se centra en seguir comiendo. Hay cosas que no quiere oír, otras que necesita saber y hasta hay algunas que le gustaría desconocer aunque piense que sepa la respuesta.
-Deberías comer...-Dice sin mirarla, cierra los ojos y se lleva otro trozo a la boca comiendo despacio, abre los ojos de nuevo y la observa esta vez si de forma directa.
"Desde luego esos ojos embaucan a cualquiera, o me ando con ojo o acabaré idiota...Será mejor que me ponga en un plan distinto, de seguir así solo conseguiré volverme loco por la dudas y preguntas..."

Deja de comer cuando se sienta frente a él y junta las manos entrelazando los dedos, los codos se apoyan en la mesa, aunque sabe que es una falta de respeto no parece importarle, su mirada es bastante fría y distante, parece que le va a dar igual lo que le digan.
"El virus...En mi cuerpo..."Cierra los ojos apoyando la barbilla sobre sus manos reflexionando por un instante. Los abre de golpe aunque de forma pausada ante la segunda frase.
-No soy humano?...-Se levanta y se aleja de la mesa lentamente mirándola preocupado y atónito de pronto. Niega con la cabeza y traga saliva hasta que topa con la pared del fondo.
-Eso...No...-Levanta la cabeza y se lleva una mano al rostro, apoyando la palma de esta en su frente, respira hondo y tras ajar la mano vuelve a responder.
-Y que se supone que va a pasar ahora?...-El aspecto benévolo y sutil lo abandona por completo reflejando de nuevo la mas verdadera esencia de su ser, el odio y el rechazo.
-Mutaré...? Me saldrán tentáculos por todo el cuerpo? Como en esos cómics pervertidos japoneses?...Si es así prefiero pegarme un tiro...-Terminó de decir mirando a izquierda a derecha. Recuerda entonces donde dejó el petate con sus armas.

Pobre...No creí que reaccionaría tan mal, en mi rostro se reflejó tristeza y preocupación. Suspiré y lo miré una vez más - No mutarás, de ser así lo hubieses hecho hace mucho... Para eso son los anticuerpos que te inyecté, ahora...- Hice una pausa y me puse de píe - Yo también estoy infectada, dime... ¿Te parezco un monstruo?- Sonreí.

John me había mostrado que no importa con lo que nacemos, uno es quien decide lo que quiere ser y lo que desea. Personas como él que fueron obligados a cargar con un virus en su cuerpo, a ser llamados "monstruos"... Cualquiera que conociera a John como yo lo conozco, juraría que ese ser es mucho más humano que muchos de los que no están infectados - Solo serás un monstruo si eso deseas... No es la apariencia lo que nos dice si lo somos o no, son las acciones... Tu me salvaste a mi y a esos niños- Le recordé - Y tranquilo, los tentáculos se quedan en los cómics- Bromee.

Mire a Haze una vez más - No tienes nada de que preocuparte, estás aquí para curarte, confía en mí- Volví a la mesa y me senté.

La mira con todo el cuerpo tenso, da varios pasos hacía ella y respira de forma fuerte y profunda, avanza de nuevo hasta quedar a la altura de la mesa, ella está al otro lado.
-Crees que no he escuchado eso antes?...Todo es así de sencillo verdad?...-La mesa sale volando hacia la derecha, no le hace falta ser un BOW para lograrlo de por sí ya es alguien muy fuerte.
Se deja caer de rodillas delante de ella encorvando el cuerpo hacía atrás y con las manos a los lados abiertas. La mira apretando los dientes y cierra los puños tomando un ángulo de 90º mas acorde con su espalda.
-Mi hermano...Mi hermana...Son...Como ahora lo soy yo, de hecho ahora yo...Soy como ellos...Sería la forma mas suave de decirlo...-Se incorpora levemente colocando una rodilla en el suelo, toma la silla por la parte del asiento sin tocarla a ella en ningún momento, solo los flecos de su cabello rozan su rostro.
-Crees que soy el buen samaritano?...El héroe que ha salvado el día?...No tienes ni idea...-Dice mientras niega con la cabeza, se inclina hacía delante quedando su rostro frente al de ella a un palmo de distancia.
-Yo soy el malo Tanya...Me dedico a asesinar a la gente, cobro por ello mucho además...Me he pasado la vida viajando de un lugar a otro, como un perro sin amo como un niño sin hogar...Lo único que le da sentido a mi existencia es cazar a la gente que me lo quitó todo...Y si algo me diferenciaba de esos cerdos asesinos bio-terroristas...Es que no era como ellos, como crees que me veo ahora en el espejo?...

Su rostro se acerca mas al de ella, suelta la silla y esta vez se agarra al respaldo, la parte superior sirve de agarre para sus manos y acerca sus labios a escasos centímetros de los Tanya. Su cabeza se inclina un poco hacía la derecha, parece que va a besar sus labios, pero nada mas lejos de la realidad su rostro pasa de largo hasta llegar a su oído izquierdo.
[color=orange]-Dices que no soy un mosntruo...Pero no tienes idea de las cosas que he hecho...Y aunque peor son las que me han hecho a mí, no hay punto de comparación con las que aun estoy por hacerles a los responsables...-Se separa lentamente, pero sin soltar la silla la mira de pié aun agarrado al respaldo, con los ojos entrecerrados.
-Todavía puedes mirarme a la cara y decirme que no soy un monstruo?...Si te besara...-Acerca de nuevo su cuerpo al de ella dejando su rostro cerca del suyo-...Lo aceptarías?...Aceptarías el beso de un monstruo?...-Se separa de nuevo con un fuerte suspiro, soltando el respaldo y dándole la espalda, se para y gira ligeramente el rostro hacia ella.
-Lamento mucho mi comportamiento, han pasado muchas cosas...Y tu no tienes la culpa de lo que me pasa...-Es entonces cuando comprende todo lo que ha dicho, lo mucho que ha criticado su estado cuando ella le ha sido totalmente sincera diciéndole que ella también lo es.
-Quizás sería mejor empezar por el principio...¿Con que me he infectado?...-No se mueve del sitio a la espera de una respuesta.

Nana se levantó asustada al igual que yo, Haze pareció no reaccionar bien a mi comentario... "¿Que pasó con su familia?... ¿Umbrella enserio lo dañó tanto? - Haze...- Lo llame en voz muy baja mientras él estaba de rodillas.

Me mantuve firme, sin mostrar cuan asustada estaba, a diferencia de Nana que temblaba y apretaba su delantal casi llorando... Sería un problema si hubiese estado John aquí - Entiendo que estés molesto pero...- No pude terminar de hablar. Fue hasta mi y se acercó demasiado a mi rostro, por un momento pensé que... No, solo me dijo al oído que yo no sabía nada, nada de él, de lo que había hecho...Se acercó una vez más a mi y mi Nana dio un salto por el susto. Guardé silencio ante su pregunta... No por que estuviese de acuerdo en que era un monstruo, si no por que yo antes amé a una persona infectada, alguien más a quien el considera un "monstruo"... ¿Por qué se tomaba un beso tan a la ligera? - No te preocupes... entiendo que estés nervioso... Las marcas de tu brazo son nada más y nada menos que colmillos evolucionados, como los de un animal salvaje... Los zombies no tienen esa mordedura por más poderosa que sea... Así que debe ser el virus G sin duda, uno de los virus más mortales de todos, es una suerte que tu cuerpo respondiera a los anticuerpos correctamente- Me tranquilicé.

Nana tomó un respiro y con ayuda de otros sirvientes limpió todo el desorden - Tienes que cuidar esos arranques de ira, sé que estas enojado con Umbrella... Pero tu fuerza ya no es la misma que antes, esta vez puedes hacer mucho daño a una persona- Le aclaré - No se exactamente que cepa esté alojada en tu cuerpo, pero no tardaremos mucho en descubrirlo... ¿Estás dispuesto a hacerte unas pruebas? - Lo miré.

Cierra los ojos llevando la vista al frente y alza el rostro respirando hondo de nuevo, mete las manos en los bolsillos del pantalón y las aprieta con fuerza.
-Ese tipo de cosas...Son las favoritas de Taka...A ella siempre le ha gustado experimentar y hacer pruebas con mi hermano Ginjo...-Se da la vuelta y la mira pero ya no indiferente su rostro muestra un estado de pena difícil de asimilar. Sus ojos tiemblan ligeramente entre pestañeo, respira profundamente pero lo hace un tanto agitado.
-Ellos me lo quitaron todo...Cuando lo ves desde mi perspectiva, quien no tiene nada que perder solo puede ganar...Pero incluso a alguien como a mí me preocupa la forma en la que se gana...
Da unos pasos hacia ella y queda frente esta a nos tres o cuatro pasos. Se quita la chaqueta y la lanza sobre una silla dejándola colgada sobre esta. Con calma empieza a abrir los puños de la camisa, se sube las mangas hasta la altura de los codos y de nuevo se acerca a donde está Nana.
-Déjame ayudarte con eso...Al fin y al cabo ha sido mi culpa...-Pasan los minutos y el mismo comprende que la tensión generada sigue en el aire, pareciera que todos esperen a que de su respuesta su aprobación.
"Como pueden siquiera estar tan tranquilos todos ante tal cosa?...He visto muchas formas de matar, muchas formas de hacer sufrir a la gente y dios sabe que yo he inventado alguna de ellas, pero esto...Es otra cosa...Merece todo el castigo que uno pueda imaginar y más...Siento que aun sin haber estado allí se ríen de mi..."

Se da la vuelta y mira a Tanya, lo hace fijamente durante unos segundos, y después se acerca a ella hablando alto y claro.
-Lo haré...Con una condición, quiero desarrollar una habilidad, algo que reservaré para ciertas personas especiales en mi vida que merecen ser tratadas de forma especial...-Le tiende la mano, pues ya se ha propasado bastante con ella hace un momento y no tiene intención de dar ninguna imagen ni impresión errónea mas lejos que la pura realidad, está enfadado.
"Solo tengo una oportunidad, no tengo siete vidas como un gato, si esto es lo que hay llegaré hasta el final, desarrollaré cuanto tenga que desarrollar y trabajaré cuanto tenga que trabajar, pero esto...No acaba aquí..."
La mira y no puede evitar relajar el gesto y esbozar una leve sonrisa con sus labios, sin dejar ver los dientes.

Lo miré un tanto confundida... ¿Una habilidad?... ¿Más de las que ya tenía?... No entendía a que se refería - Eso no depende de mí, solo ayudare a que te controles pero en cuanto a las habilidades... Es algo que debes hacer por ti mismo- Aclaré.
Caminé, avanzando un poco por los pasillos - Acompañame - Me giré a verlo y sonreí.

Una vez en el laboratorio, le pedí que se sentara en una de las camillas y me coloqué la bata de laboratorio - No tomará mucho tiempo - Tomé lo necesario para tomar muestras de sangre y me acerqué a Haze - Espero que no tengas fobias, no me gustaría llevarme un golpe - Reí un poco y tomé la muestra de sangre que necesitaba.
Dejé esperando a Haze un rato mientras él se colocaba un algodón con alcohol en donde había dado el pinchazo. Estaba confundida, no era la misma cepa que John... Sin duda era el G, pero... ¿Acaso era esta una cepa más evolucionada? - No creo que haya problemas... Pero por si las dudas tendré que estarte haciendo pruebas cada semana, junto con mi guardaespaldas... ¿No hay problema con eso?- Pregunté.

Cual fuera su respuesta yo le sonreiría, parecía estar muy tenso después de lo ocurrido y lo menos que quería era que se enfermara otra vez - Umbrella... Nos ha hecho daño a muchos, pero... No quieras cargar todo el peso, porfavor- Hice una pausa y lo miré - Déjanos ayudarte- Sonreí

Desde hace rato Haze ha dejado de sonreír, casi como un alma en pena que vaga por la casa, sus ojos se ven ahora mas apagados y sus gestos se han relajado al punto en el que parece caminar por pura inercia, es la voz de Tanya que al decir "Acompáñame" lo saca del trance en el cual se está viendo sometido.
Recorre los largos pasillos siguiéndola, lo normal en Haze sería que la estuviera observando fijándose en su trasero y pensando en todo tipo de groserías que estaría recitándole al oído en la cama sobre ella, sin embargo su vista está perdida sin mirar a ningún punto fijo.

-No hay problema...-Dice simplemente, su tono de voz se escucha mas apagado. No puede evitar el estar en otra parte pensando en otras cosas, por lo cual se quita la camisa dejando su torso descubierto. El brazo derecho está lleno de cicatrices, donde las costillas también se ve una marca un tanto extraña pero mucho menos pronunciada.
"A decir verdad...Llevo toda la vida esperando, por un poco mas no pasará nada..."Absorto en su mente ignora el comentario de Tanya, cuando la aguja se introduce en su brazo respira profundamente tumbado en la camilla, está mirando el techo y de pronto cierra los ojos. La camilla está en un angulo de 120 grados, por lo que no está del todo tumbado, sino en una postura mucho mas cómoda.
Se coloca el algodón como un instinto nato, es como si le hubieran inyectado agujas durante mucho tiempo y ya estuviera mas que acostumbrado. Tanya se retira y Haze sigue con los ojos cerrados sin decir palabra.
"Cualquier habilidad que desee desarrollar es cosa mía...Pues que así sea..."Tose levemente, se le ha secado la boca y se siente con ardor.
Se lleva una mano al rostro, su frente está cálida pero su mano derecha está helada, toca con la izquierda su frente y también está helada. Deja las manos y sigue sujetando el algodón presionando para que no quede hematoma alguno.
"Siempre he creído que mi odio es infinito, y esta es la prueba de que así es...No quedará nadie que salga impune...Lo juro por mis antepasados, me vengaré de todos aquellos que han hecho tanta maldad, estableceré un equilibrio y nadie volverá a jugar a ser dios..."

Abre los ojos y la mira serio desde donde está, su cabeza no se mueve solo entorna la mirada y logra articular ciertas palabras, con cierto desde debe añadirse.
-El problema es que estando aquí varias semanas ellos seguirán propagando sus infecciones y haciendo lo que les plazca, porque debería quedarme?...-Una pausa genera que respire profundamente y de nuevo mire al techo, parece pensar y de nuevo vuelve su mirada hacia ella esta vez si encarando la con el rostro.
-Guardaespaldas?...Lo mismo da, no supone ningún problema para mí-Dice de repente para después continuar ya incorporándose y mirando al suelo, su mano derecha va hasta su frente donde agarra el cabello que sale de la parte superior de su cabeza y lo agasaja de forma calma y lenta.
-No me queda nada mas que mi odio Tanya...-Levanta la vista hacia ella decidido pero sus ojos denotan mucha tristeza, se ven vidriosos aunque no parece que tenga la mas mínima intención de soltar una lágrima.
-Y me atrevo a decir que eso es lo que me mantiene vivo, lo que me ha traído hasta aquí, es infinito es un desprecio que por mas que intento suprimir abarca toda mi mente y no me deja pensar, es lo único correcto que puedo hacer a partir de ahora...Me he pasado toda la vida creyendo que la maldad me haría mas fuerte que el odio me volvería imparable, huyendo de la policía por aquellos que asesiné terminé en un subterráneo y si no morí fue porque tuve mucha suerte de encontrarte allí, te lo agradezco, y te estoy muy agradecido por todo lo que has hecho por mí, pero si esperas que me quede sentado sin más...Eso no puedo hacerlo...-Se levanta y se coloca la camisa sin abrochar los botones, baja la cabeza ligeramente y al cerrar los ojos exhala de forma relajada.
-Recogeré mis cosas y me marcharé...-Sin decir nada mas se da la vuelta mirando la puerta, la observa pensativo, pro no se mueve.

Me puse de píe y lo tomé con cuidado por la muñeca - No te vayas...- Hice una pausa - No eres el único que ha sufrido... No me importa lo que hayas hecho en el pasado... Me importa lo que hiciste por mí en el presente... ¡Por ti estoy viva!- Exclamé.

No podía permitir que se marchara así... Quería ayudarlo. Él podría estar bien físicamente, pero no en lo emocional... Quería demostrarle que todos aquí habíamos pasado por muertes, por traumas y reencor hacia los mismos que le habían hecho tanto daño. Posé mi frente sobre su espalda - No te vayas... Déjame ayudarte... Por favor...- Dije en voz baja y cortada, suplicando. Me recordaba tanto a John y lo mal que lo traté cuando llegó... No quería que se repitiera lo mismo, quería ayudar, pagar con todo lo malo que hice en el pasado.

Sentía su frustración además, temía el perder un solo día para actuar contra Umbrella... Estaba muy dolido, demasiado - No digo que dejes de luchar... Pero quiero que de vez en cuando tomes una mano dispuesta a ayudarte a pelear - Agregué.

Su mirada sigue fija en la puerta sin pronunciar palabra, el hecho de que tome su muñeca es lo que lo hace salir del trance en el que estaba sometido parpadeando por un instante aunque de forma pausada y ladeando la cabeza a izquierda y derecha levemente.
De reojo la empieza a ver como se apoya en su espalda, aunque no lo parezca Haze es muy cálido, solo cuando se está muy cerca de él puede notarse. De haber sido otra persona otra circunstancia en cualquier otro momento le habría roto la mano al acto, pero no lo hizo, solo puedo atinar a mirarla un instante de reojo y volver al vista al frente.
"Quedarme aquí...Yo no tengo familia ellos me la arrebataron, no tengo casa y tampoco lugar al que ir..."
Vuelve la vista al frente y no puede evitar sonreír mientras vuelve a cerrar los ojos un instante bajando la cabeza un poco.
Sin decir nada lleva su mano hasta su pecho soltando así el agarre que ella ejerce sobre él, acto seguido y sin dejar que pase prácticamente nada de tiempo es él quien toma la mano de esta la estrecha con fuerza pero no tanta como para hacerle daño alguno.
-La verdad...-Dice cuando su otra mano se alza y rodea su cintura quedando el dorso a la altura de sus lumbares, pero con el puño cerrado, sin ejercer fuerza tan solo una ligera presión para que se sienta cercana a él.
-...Es que llevo mucho tiempo viajando de aquí para allá, estoy cansado...Y empiezo a entender que solo no llegaré a ninguna parte...

Baja el brazo y suelta su mano con calma, al darse la vuelta y encarar la no puede evitar sonreír de nuevo, los recuerdos le asaltan y además empieza a sentir algo que hacía años muchos años no sentía, que lo aceptaban, no como a un perro ni como un soldado adiestrado para matar ni tampoco un sujeto de pruebas sino como persona.
-Me he pasado toda la vida luchando contra los de mi propia sangre al punto en que me volví como ellos, hice creer a todo el mundo que era mas despiadado que mi hermano, por un tiempo me fue bien pero cuando empezó a fallar me di cuenta de lo vacío que estaba en realidad...-Quizás no deba tomarse esa confianza pero aun así lo hace siempre ha sido así, La toma de la barbilla con dos dedos y el pulgar y pone la frente sobre la de ella con los cerrados.
-Solo tengo unas pocas condiciones para acordar si me quedo, la primera de ellas es que entiendas que no me debes nada, tu me salvaste a mi primero no lo olvides, de no ser por ti yo no habría sido capaz de sobrevivir ni de haberte acompañado hasta aquí...-Abre los ojos y retira su mano y rostro lentamente, ella puede ver que el azul de sus ojos es muy claro y hasta extraño, eleva el gesto tomando superioridad y le tiende la mano como si fuera a sacarla a bailar inclinándose un poco como si fuera a bailar.
-Que me permitas invitarte a cenar alguna vez, trato hecho?-La mira ladeando la cabeza hacia la derecha sonriendo únicamente con sus labios.

Pensaba que caería apenas dejé de sentir su espalda en mi frente. Tomó mi mano y me acercó a él... Lo miré sorprendida y confundida a la vez - ¿Haze?- Dije su nombre para intentar llamar su atención y que, me dijera que había pasado, pero no hubo respuesta.
No estaba enojado, ni mucho menos, era un alivio... Empezaba a entender que estábamos aquí para ayudarlo, apoyarlo en lo que fuese necesario y.... ¿Me tomó de la barbilla? Otra sorpresa del día.

Me asusté un poco, a mi mente vino un doloroso recuerdo... Era tan familiar, no podía evitar pensarlo en estos temas. Haze desvió todo pensamiento en mi mente, una vez mencionó las famosas condiciones... ¿Me pedía que no le agradeciera?... Como no hacerlo. No dije nada, sonreí un poco aunque él no pudiera verme estando nuestras frentes tan juntas - Lo prometo...- Susurré. A los pocos segundos se alejó de mi y dio una segunda condición, la cuál por cierto me pareció bastante tierna y no pude evitar sonreír - Trato hecho- Dije dándole la mano, como se cerraría cualquier trato.

Asiente pues cuando le da la mano y se incorpora sin soltarla tirando de la misma hacía él adelantando su pié y cuando se cruza con ella le da una vuelta y la abraza por la cintura quedando la espalda de ella pegada al torso de Haze, sin poder evitar reír un poco. Ni él mismo se acuerda de cuando ha sido la última vez que ha podido divertirse sin matar, despedazar,quemar o apalear a alguien.
-Bien entonces lo primero es lo primero...-La vuelve a dar otra vuelta dejándola ya separada de él, vuelve a la camilla y se sienta pensativo, su mano mesa su barbilla. Sus ojos parecen estar fijos en algo es entonces cuando se sobresalta.
-Otra cana!? Pero que diablos pasa!?-La mira extremadamente preocupado-El virus no me estará haciendo envejecer años en cuestión de días no?-Baja de la camilla y empieza a dar vueltas en círculos cortos algo preocupado a lo que gesticula con las manos al tiempo que habla.
-No nos pongamos nerviosos...Debe de haber una explicación para todo esto...ya esta!-Se para y se gira hacia ella señalándola con los dedos índices de las dos manos.
-No...No tengo ni idea...-Borra de su expresión ese gesto de alegría y sigue pensativo. Se acerca a ella y la toma de la mano, la lleva hasta la camilla y se sienta guiándola para que se siente a su lado.

-Veamos...De las pruebas que me acabas de hacer...has averiguado algo? Por mínimo que sea?...-Pregunta ya juntando las manos y moviendo las adelante y atrás, esta algo nervioso, incluso puede que cuando mas preocupado esté sea ahora que empieza a llenarse le el cabello de canas, pero desde luego abandonado todo derrotismo parece estar mas receptivo por el momento, Tanya debería atesorar esos momentos, nunca se sabe cuando podrían volver a repetirse.
-Y no me digas que me calme, estoy calmado, podría acetar una pulga a 200 metros y volarle el trasero operar a corazón abierto y trasplantar un hígado!-Bufa apartando un mechón de delante de sus ojos y se tranquiliza mirándola de reojo a la espera de que ni se le ocurra decirle que se calme.
-Vale...Ahora si, cuéntame...Creo que ya se me está pasando...

Me sorprendió un poco que actuara de una manera tan juguetona conmigo, pero no me molestó, era bueno que después de haber pasado por tanto se desahogara y jugara de vez en cuando.

Me senté a su lado y no pude evitar reír un poco con su pregunta y la manera en la que se exaltaba - Por el contrario... El virus tiene como principal propiedad regenerar células, es como un elixir de la juventud... Quizá sea algún efecto secundario, como te dije... No se bien de que cepa se trate-Respondí

Preguntó si había averiguado algo... Pues ya se lo había dicho, no era la misma cepa - De momento solo sé que la cepa que llevas es una mutación de lo que se supone traen todos los especímenes "P", es decir, los que, como tú, no sufren mutaciones... Haría falta ver si también desarrollaras las habilidades que ellos tienen y sin ninguna complicación, solo queda esperar lo mejor- Respondí.

Me puse de píe y lo mire - Ahora... en cuanto al cabello, pues... verás...- Hice una pausa - Mi guardaespaldas y su hermano, ambos BOWs eran albinos... Quizá sea ese el efecto del virus, así que... si lo que esperabas eran solo canas, me temo que todo tu cabello se hará blanco- Dije, esperando ver su reacción.

Se cruza de brazos y cierra los ojos asintiendo a todo lo que Tanya le dice, no es un científico, pero entiende del tema. Da unos pasos alrededor de esta.
-Entiendo a lo que te refieres, y doy por hecho entonces que no has averiguado nada mas, que has llegado al punto límite de lo que puedes contarme...-Respira hondo y sigue caminando poco a poco por la habitación pensativo, se frota las manos y las lleva a su barbilla para agasajarla, juega con el hueso de la mandíbula mientras medita la situación.
"Si esto es así poco más puedo hacer ahora que no sea esperar...Debí reunirme con él en Londres, me pregunto si estará bien..."
Se para de nuevo frente a ella y abre los ojos recogiendo su cabello hacía detrás, lo ata con una goma para el pelo y rebusca en los bolsillos.
-Si no puedes hacer nada mas lo mejor será que vayas a hacer lo que tengas que hacer Tanya, estando aquí solo pierdes el tiempo, no parece que tengas ningún interés en conocerme ni en saber nada mí, por otra parte solo te limitas a responderme, no se si es porque eres muy tímida, si te intimido o sencillamente esta estudiándome, pero llega a resultar un poco incómodo la verdad...-Saca de su bolsillo un trozo de papel el cual trae varias cosas apuntadas.
"Tendré que volver a prepararla lista, las cosas han cambiado y debo hacer algunos ajustes, dejaremos esto para luego entonces..."

Vuelve a guardar el trozo de papel en su bolsillo sin hacer mención alguna de él, se empieza a abrochar la camisa, cerrando los botones.
La coleta se posa sobre su hombro cayendo por su pecho, se da cuenta entonces de que todo su cabello desde que han entrado en la habitación se ha ido volviendo blanco cada vez mas rápido y con mas frecuencia. Cierra los ojos con gesto triste y se sobresalta un instante.
-¡Noooo!-Se va encorvando y empieza a sujetar su cabello por la mitad de este con su mano izquierda, con al derecha empieza a dar fuertes tirones para arrancarse la parte que sobra de la coleta. Se le puede ver extremadamente nervioso, prácticamente fuera de sí.
-¡No quiero ser como él!-logra finalmente arrancarse el cabello, lanzando el mechón al suelo, el subidón de adrenalina que le entra a pesar de haber cumplido ya lo que quería no lo abandona, el recuerdo de aquel tipo de cabello blanco tirado en el suelo, envejecido y de largo cabello blanco lo está volviendo loco.
-¡Ahhhh!-Sale corriendo contra la puerta, en ningún momento piensa en abrirla, literalmente la atraviesa sin detenerse. Sale por las puertas y atraviesa alguna que otra ventana, no encuentra la forma de salir al exterior y cuando lo logra salta sobre los muros para caer al otro lado y correr sin parar hacía el bosque.

//OFF: salgo del tema de forma temporal.